
Control interno, el swing perfecto para ahorrar tiempos y recursos
Control interno, el swing perfecto para ahorrar tiempos y recursos
Un movimiento armónico y preciso requiere un gran control interno. Esto aplica tanto al golf como a los negocios. ¿Y por qué los comparamos tanto? Porque tienen mucho en común. En ambos casos, es imprescindible trabajar la coordinación y alineación entre todos los factores involucrados para lograr una mecánica fluida.
Un golfista entrena la estabilidad del core, cuida su postura y trabaja su movilidad. Las empresas, por su parte, necesitan orquestar sus finanzas, la gestión de inventarios, proveedores, viáticos y flujos de trabajo para que las distintas áreas funcionen sincronizadas, sin fricciones.
Maximiliano Guidolin, líder de Interaction, y Cristian Mora, líder de RPA, explican la importancia del control interno en una empresa y cómo estas soluciones contribuyen a fortalecerlo.
La clave para un juego sin errores
“La cantidad de documentación que manejan las empresas es enorme. Por eso, automatizar los procesos en los diferentes sectores resulta esencial para reducir errores y minimizar riesgos”, cuenta Cristian.
Pero sabemos que no se trata solo del volumen. La documentación también debe fluir de forma sincronizada y sin fricciones entre las áreas administrativas, financieras y sus sectores dependientes, tanto internos como externos.
“Entiendo el control interno como un conjunto de procedimientos para mejorar la eficiencia operativa. Cuando todo está ordenado, no hay conflictos ni demoras entre áreas. Los procesos fluyen”, agrega Maximiliano.
“La información, especialmente la relacionada con temas contables, tiene que estar accesible para empleados y clientes. Por eso, la clave del control interno está en la transparencia y la trazabilidad”, concluye Cristian.

Control automatizado, áreas en armonía
Las soluciones de RPA fortalecen el control interno al automatizar tareas con gran volumen de información. “Conciliaciones bancarias, seguimiento de presupuestos, gestión de usuarios dentro de distintas herramientas, auditorías o procesamiento de historias clínicas son algunas de las automatizaciones más solicitadas en mi área”, cuenta Cristian. “Todo eso, y tareas de otros tantos sectores, se puede automatizar”, agrega. Estos procesos generan grandes volúmenes de datos que, al digitalizarse, permiten ganar tiempo y mejorar la trazabilidad.
“Y si algo debe ser transparente —sobre todo en temas contables—, es eso: la trazabilidad y el cumplimiento”, señala Cristian. En este mismo camino, los bots generan registros digitales —logs— que funcionan como insumos valiosos para el control interno, ya que son totalmente auditables.
Por su parte, Interaction es una solución que cuenta con tres portales principales —proveedores, viáticos y compras— que centralizan la información en un único canal, aportando orden y sistematización a la gestión administrativa. A través de nuestro sistema de autogestión, los proveedores pueden cargar sus facturas, los colaboradores rendir sus gastos y las distintas áreas gestionar sus compras de manera más eficiente y organizada. Esto no solo mejora los tiempos, sino que también aporta transparencia y facilita el trabajo del área de administración. “Un negocio sin el portal tendría poca transparencia, procesos lentos y pocos auditados”, cierra Maximiliano.
El verdadero valor del tiempo
Nadie ve las horas de entrenamiento físico que hay detrás de un golfista. Pero sin ese trabajo de base, no hay potencia ni precisión posible. De modo similar, el control interno no siempre está en el centro de la escena en los negocios, pero es lo que permite que todo funcione con agilidad, coordinación y eficiencia.
Porque en el golf y en los negocios, el rendimiento empieza mucho antes del golpe: el trabajo previo es el que marca la diferencia. Hay que preparar el swing perfecto: sólido, preciso y listo para cualquier desafío.
Lograr ese swing requiere herramientas que aseguren el control de cada decisión y proceso. Con soluciones como Interaction y RPA, en TopGroup brindamos ese soporte invisible pero esencial que permite a las organizaciones avanzar con firmeza.